Galería  

Viernes 26 de marzo 1999

Un ateniense recorre el mundo

Escultor nacional formado en el taller de "Paco" Zúñiga, en México, se encuentra en el país creando imágenes religiosas.

 

Carmen Juncos

La República

 

El escultor Orlando Carranza disfruta minuto aminuto la pasión de su vida: esculpir imágenes religiosas.

de familia, en diferentes lugares, de todo el país y de Centroamérica. Joven, humilde, sonriente y amable, el artista revela en el brillo de su mirada el fuego de creación que alimenta su espíritu. Está claro desde que uno entra en contacto con el escultor y su mundo que solo vive para crear.
En efecto, cada imagen religiosa que surge de las manos del escultor es original, aun cuando suele repetir , a veces el producto del mismo molde. Cada rostro de la Virgen María, del Nazareno o de un santo, es, fruto de la inspiración del momento.

Para un escultor multifacético, cuya preferencia es crear imágenes religiosas, la época de Semana Santa puede convertirse en una verdadera vorágine, Así encontró GALERÍA al escultor Orlando Carranza, quien hizo una larga pausa en su febril trabajo para concedernos una entrevista.
Una casa de habitación se ha convertido de repente en taller de imaginería con la llegada al país de Orlando Carranza, un escultor costarricense que desde 1984 se fue a México para estudiar y formarse como escultor junto al gran maestro Francisco "Paco" Zúñiga.
En ese taller improvisado,entre moldes, pinceles, pinturas y gran cantidad, de figuras religiosas de todo tipo y tamaño, Carranza junto a sus ayudantes, quienes aprenden al lado los secretos del arte, trabaja sin descanso para entregar a tiempo las imágenes que le han solicitado hacer sacerdotes y otras personas, para colocar en iglesias y casas de
 
El rostro de la Virgen María adquiere una expresión diferente en cada representación  de ella surgida de las manos del escultor Orlando Carranza

La fotografía de Marco Monge fue sustituida  debido a las  malas condiciones del periódico original para escaneo (Actual Foto Carrillo)

 

Mucha obra y
pocos palabras


Orlando Carranza habla
muy poco pero todo en él es elocuente, mientras conversamos, salta .presuroso ante cualquier llamado o consulta de sus compañeros de labores.
Hay dos razones; las imágenes han de ser entregadas a tiempo y éste no le alcanza y, por otro lado, las consultas de sus pupilos, son respondidas enseguida por el maestro ya que según explica, ésta es la mejor manera de aprender.
"Esto no se puede aprender en una universidad sino en un taller", asegura.

 Y Carranza es un fiel representante de ese pensamiento.

 


El, que comenzó a ganar concursos, de pintura o escultura cuando estudiaba en la escuela en su Atenas natal, partipipo en un concurso luego a nivel nacional, realizado en San José y clasificó, pero no pudo Ser el ganador pues no tenía la edad reglamentaria.
Sin embargo, el artista costarricense-mexicano Francisco "Paco" Zúñiga, quien vino al país para ser jurado eh el concurso, conoció al joven Carranza y .lo invitó a visitar su taller. en Mexico.
Esta invitación significó el gran salto para Carranza, quien no lo pensó ni una vez y se fue por tres años, comenzando así su carrera de escultor.

      Continua