A propósito de mi
obra...
Ofrezco esta
exposición a mi hijo e hijas, a mi nieta y
nietos, quienes constituyen mi eternidad
biológica y espiritual.
Mi propuesta
escultórica es ecléptica y establece un
mundo paralelo entre el mito, la realidad y
la fe.
Busco
interpretar lo espiritual, lo material y
plasmar la angustia existencial de una
sociedad en la cual el pensamiento mágico
-religioso gravita entre lo racional y lo
patológico .
La
persistencia en mi obra de la figura alada
con supremacía, acaso ángeles caídos,
heraldos de la buena o mala nueva, reclaman
a su manera " el paraíso perdido" en mi
patria.
La fe de
poseer un ángel guardián, custodio protector
y guía en el tránsito azaroso de la vida.
La escultura,
el desdoblamiento de mi ego, de mi otro yo
que anhela la transformación personal y el
deseo de propulsar el renacer de la
esperanza, la paz y el amor de mi
generación.
EL ESCULTOR |